martes, julio 17, 2012

La niña...

Yaiza se encontraba en un lugar conocido para ella, el antiguo comedor de su casa. Donde creció y nació. Era de madrugada, serían las 3 o las 4 de la mañana. Su hermana la distraía haciendo ensayos de baile, movían los brazos como si fueran sevillanas. Nunca fue su baile preferido pero le gustaba enseñarle algún paso a su hermana pequeña. Llevaban la bata de invierno puesta, era azul. Yaiza quería acostarse pero su hermana seguía rondando por allí. De repente ella desapareció y Yaiza pensó que habría ido a dormir. Normalmente era así, era la pequeña y se habría dormido ya. Aunque Yaiza estaba descolocada, la seguía buscando. Entonces miró a las habitaciones a ver si la encontraba, si encontraba pistas de qué habría podido pasar...estaba todo bastante oscuro, el pasillo de su casa...y apareció su madre. La cogió como el hombre del saco coge a los niños que se pierden...que saben que están en su casa pero están perdidos. Ella veía el suelo desde arriba, recorría los pasillos desde otra perspectiva, pero ya no estaba tan perdida. Su madre le explicó que su hermana ya se había ido a su casa...pero..esa no era su casa?? Y Yaiza creía conocer esa casa, la casa donde nació..pero se quedó sola...creyó reconocer a sus padres durmiendo en su cama, había sombras y le tranquilizaba saber que estaban allí. Y enotnces, desde arriba, miró abajo y vió a una niña ..pequeña, con el pelo recogido, delgada, ingenua, y morena y la miraba pidiéndole ayuda con ojos vivos. Ella sintió pavor, pánico de ver aquella niña. Quién era? qué hacía allí? la oyó decir algunas palabras, le pedía indicación de algo. Le pareció oirle decir:¿ Dónde está la barra del bar? Y Yaiza no sentía más que los latidos de su propio corazón y la n´ña que la miraba, la niña quería asustarla o..le pedía ayuda? qué quería? quién era? Yaiza sólo atinó a alargar su brazo para alcanzarla y ahuyentarla, no la asustaría, le daba miedo, por éso quería pegarle. Desde donde estaba no llegaba, no sabía si podría hacerlo, pero tenía que intentarlo. Parece que la niña no desparecía... Y Yaiza abrió los ojos...sintió que la lucha más combativa que podía tener era....con ella misma... Martes, 17 Julio 2012.

viernes, julio 06, 2012

Hay cosas que no se pueden cambiar...ni explicar... como el viento, la nostalgia, la muerte, el odio... los sentimientos... cosas como esas son las que te dividen... las que se te llevan, las que te apagan, las que separan mente de corazón... las que hacen que quieras morir y a la vez te impiden hacerlo.. Y solo te queda hacer una coraza, buscar refugio, hacer de tripas corazón, levantar la cabeza, bajar la mirada, respirar profundo y avanzar. Y poco a poco... esa coraza desaparecerá y con ella... el dolor.http://youtu.be/9te9-JFbHdA

martes, noviembre 01, 2011

Ella era mala

Ella era mi hambre,
mi mal bebé.
Llevaba en la sangre..
dejarse querer.

Ella era to' l'arte,
la noche de ayer.
Ella era más antes,
que el amanecer.


Ella fui mi agravio,
el puro diablo,
pura tentación.

Ella era mala,
pero palabra que fue la mejor.

Solo yo tuve el honor,
te pujar por sus pedazos.
De pintarle su retrato,
de tener su compasión.

Solo yo tuve el honor,
de rozarme con su flor.
De su probar de sus peligros,
de tener su maldición.
-
Ella era mi ciencia,
mi numero pi.
Mi mala conciencia,
mi eterno desliz.

Ella fue mi ganas,
y mi frustración.
Ella era la santa,
de mi devoción.

Ella fue mi sabia,
ella fue mi rabia,
mi revolución.

Ella era mala,
pero palabra que fue la mejor.

Solo yo tuve el honor,
de pujar por sus pedazos.
De pintarle su retrato,
de tener su compasión.

Solo yo tuve el honor,
de rozarme con su filo.
De probar de sus peligros,
de tener su maldición

http://www.youtube.com/watch?v=YMwRPyGPYYE">

CLOSER

Alice: ¿Por qué no me lo habías dicho antes?
Dan: Cobardía.
Alice: ¿Por qué la amas? ¿Es porque es exitosa?
Dan: No, es porque no me necesita

CLOSER

miércoles, abril 27, 2011

Un casi final de día...
nos damos cuenta de lo importante que es un sólo momento
de que las cosas buenas son eternas.

La huella de lo efímero,
la fugacidad de la calma.
Soy paz en la tormenta,y tormenta cuando hay paz.
No soy.
Silencio.

Dos amigos
Le gustaba hacer reir, era el alma de la fiesta.
De entretenimeinto hacer poesias y deleitar a su gente.
No tenía costumbre de coger cigarros , aunque sí puros.
El otro había llevado una vida dura, marcado por la tragedia.
Rodeado de paz y campo, con una gran alegría a punto de venir al mundo para hacerle de nuevo abuelo.

La gran valentía de la vida consiste en cómo afrontas a aquello que te puede atemorizar.
Esos son los valientes, de los que tenemos que aprender.

Una nueva etapa, tu vida ya no es lo que era.
A solas, a solas con tu familia, con tus amigos,
lo más duro...a solas con tu cabeza.

Entonces uno de ellos pidió un columpio para balancearse con la libertad.
Mientras otro saltaba vallas mientras él intentaba volar.
La vida te deja cojo de un pie y manco de alma.

Sonreía en el hospital, se señalaba dónde le inyectaban anéstesias y bromeaba
sobre su apetito.Pero nos llenó de vida a todos.
Y se fue de pasar un día con la familia.

Aquí oscureció, y las gargantas se hicieron un nudo pensando lo injusta que puede llegar a ser la vida.

Entnonces una brisa de aire balanceó el columpio,
se oyeron risas,
El cielo estaba tapado por las nubes hacia el frente..
pero al mirar hacia un lado siempre estaría aquel trocito teñido de rojo...
que les haría sonreir para recordarles LO ORGULLOSOS QUE ESTABAN DE ÉL.

jueves, enero 27, 2011

A mí....

Me encanta el mar.Y que se me erice la piel.
Me encanta pensar que me piensan.
Me gusta llenarme la bañera y olvidarme de todo.
Despertarme y no saber qué dia es.
Y darme cuenta de que es fiesta.
me gusta dormir la siesta y perder el norte. Me fascina.
Me gusta cerrar los ojos en la piscina y escuchar las voces de los niños riendo.
Me encanta la carcajada de un bebé.
me gusta cómo miran, su curiosidad.
Me gusta el desmadre del verano.
Y volver.
Lo creativo.
Que mi perro se suba en mi cama.
Me encantan las braserias.
Los chiringuitos de playa. Y todo lo de alrededor.
Visitar a la familía, sobretodo a los abuelos.
Adoro los spas y todos sus tratamientos.
Me pirro por un bocadillo de jamón serrano.
En general me gusta lo salado.
Entrar en una tienda y que me guste todo.
Me gusta que me pregunten cosas.
El sol y el día despejado.
Que me pongan la boca en la frente para ver si tengo fiebre.
Los detalles inesperados.Leer revistas.
Despertarme por la noche y querer deseperadamente.
Que me llamen en el médico nada más sentarme.
Me gusta un cajón lleno de recuerdos.
La parte de las sábanas fresquitas.
Me gusta el color y la sensación despues de haber ido a la playa.
Hablar con mis amigas.
Mi familia y todas sus cosas.
Los músicos del metro.Las pipas churruca.Y los kikos.
El vermout. Comer. Comer bien.
Tener un presentimiento.Emocionarme.
Me gusta el ruido del agua del vecino de arriba.
También me encanta pegar la cara y el cuerpo a la madera fria de mi habitación.
Me chiflan las velas.
Que me mires.
Me encanta brindar.Que nos miremos.
Me apasiona soñar. Y que se cumpla.
Me gusta que suene una canción.
La luna llena.
La pasta.Y las pizzas.
Que me lleven a cenar.
Las improvisaciones.
Las locuras.Y que me llamen loca
Un mensaje de movil.
El olor despues de hacer el amor.
Que entre sol por la ventana.
Escaparme sola a cualquier sitio.
Adoro hacer el payaso y partirme de risa.
Pensar y sentir durante el trayecto de un viaje.
El baile.
Soñar que vuelvo a hacer gimnasia.
Soñar...y meterme en el sueño.
Los mercadillos medievales.
Me encantan los masajes.
Descubrirte.
Hacer lo que me da la gana.
La sensación de entender el mundo.La de no entenderlo tb.
Cambiar el mundo
Que me cuenten un secreto.
Que cuenten conmigo.
Los magnificos instantes justo cuando se soluciona un problema.
Notar cómo me sube el vino.
La sensación de libertad.Ayudar a alguien.
Me gusta desyunar. Y mucho el café con leche de las mañanas.
Ir de vacaciones y pedir un bikini con el café.
Descubrir los minutos de magia.
Los Domingos por la mañana.
No me gusta cómo suenan los tacones cuando vas sola.
Ni los pinchazos.Me muero con los análisis de sangre.
No me gusta el higado para comer.
Ni el chocolate con leche.
Me pone nerviosa la gente que no mira a los ojos.
Odio no decidir mis momentos.
No perdono la traición ni la mentira.
Detesto la hipocresía.
No me gusta el estrés.Ni el olor a gasolina.
Ni los párkings.
Me dan miedo las tormentas, el aire, el fin del mundo.
Que mi familia enferme.
Sentir pánico.Detesto mosquearme hasta perder los nervios.
No tener control.Ni la gente con demasiado control.
Odio un día gris.Y la vainilla.
Y esos olores empalagosos o florales.
No me gustan los guisos, ni los mazacotes de carne.
No puedo con la carne poco hecha.
No me gusta que me echen el azúcar en el café.
Ni la leche sola.
No me gusta la monotonía.
Ni los bordes de la pizza. Siempre me los dejo.
Que hagan ruido mientras duermo.
Detesto que me pregunten si estoy enfadada cuando estoy muy enfadada.
Odio equivocarme en cosas importantes .Y ser a veces tan despistada.
Me dan pena las mujeres sumisas.Y asco los "hombres" que dicen serlo.
No me gusta septiembre.
Ni la sensación de madrugar. Todo está muy quieto.
No me gusta no saber sumar mentalmente.
Ni tener sentido de la orientación.
Ni entender la política.
NO me gusta que me pregunten para cúando el carnet de conducir.
Detesto los ligones de discoteca.
El cubata de coca cola.
Odio que me pregunten si bebo coca-cola.
Es más, odio que lo den por hecho que bebo Coca-cola
Odio las cosas fáciles.
NO puedo con la gente que se me cruza por la calle cuando tengo prisa.
Ni cuando no la tengo tampoco.
No me gusta lo típico.
Detesto los malentendidos.Discutir con alguien a quien quiero.
La primera sensación de levantarte y darte cuenta de que tienes un problema pendiente.
Me dan cada vez más miedo los aviones.
La gente que me mira como si me hiciera un favor.
Me da pereza llamar por tlf.
Detesto la gente cotilla.La aborrezco.
Y las preguntas personales de gente que no es de mi confianza.
No me gusta beber del mismo lado del vaso todo el rato.
Me da asco la gente que escupe.
No me gusta tener que esperar.

lunes, enero 24, 2011

:)


Antes que nada, perdona si huele un poco a cerrado, hacía mucho tiempo que nadie se alojaba aquí, y menos aún con la intención de quedarse. Ábreme bien de puertas y ventanas. Que corra el aire, que entre tu luz, que pinten algo los colores, que a este azul se le suba el rojo, que hoy nos vamos a poner moraos.
Y hablando de ponerse, vete poniendo cómoda, que estás en tu casa. Yo, por mi parte, lo he dejado todo dispuesto para que no quieras mudarte ya más.
Puedes dejar tus cosas aquí, entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando. Los primeros están llenos de errores, los segundos, teñidos de ganas de no equivocarme otra vez.
El espacio es tan acogedor como me permite mi honestidad. Ni muy pequeño como para sentirse incómodo, ni demasiado grande como para meter mentiras.
Mis recuerdos, los dejé todos esparcidos por ahí, en cajas de zapatos gastados y cansados de merodear por vidas ajenas. No pises aún, que está fregado con lágrimas recientes, y podrías resbalar. Yo te aviso.
El interruptor general de corriente está conectado a cada una de tus sonrisas. Intenta administrarlas bien y no reírte demasiado a carcajadas, no vayas a fundirlo de sopetón.
No sé si te lo había comentado antes, pero la estufa la pones tú.
Y hablando del tema, he intentado que la temperatura del agua siempre estuviera a tu gusto, pero si de vez en cuando notas un jarro de agua fría, eso es que se me ha ido la mano con el calentador. Sal y vuelve a entrar pasados unos minutos. Discúlpame si es la única solución, es lo que tenemos los de la vieja escuela, que a estas alturas ya no nos fabrican ni los recambios.
Tampoco acaba de funcionarme bien la lavadora. Hay cosas del pasado que necesitarán más de un lavado, es inevitable. Y hay cosas del futuro que, como es normal, se acabarán gastando de tanto lavarlas. La recomendación, ensuciarse a su ritmo y en su grado justo. Eso sí, no te preocupes por lo que pase con las sábanas, que las mías lo aguantan todo.
Para a acabar, te he dejado un baño de princesa, una cama de bella durmiente, un sofá de puta de lujo y algo de pollo hecho en la nevera. Para que los disfrutes a tu gusto, eso sí, siempre que sigas reservando el derecho de admisión.
Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú. Aquí no vienes a competir con nadie, sino a compartirte a mí. Y lo de dar explicaciones, para el señor Stevenson.
El resto, no sé, supongo que está todo por hacer. Encontrarás que sobra algún tabique emocional, que falta alguna neurona por amueblar, y que echas de menos, sobre todo al principio, alguna reforma en fachada y estructura.
Dime que tienes toda la vida, y voy pidiendo presupuestos.
Dime que intentaremos toda una vida, e iré encofrando mis nunca más.